Os escribo desde el salón de casa mientras relajo después de haber competido esta mañana en la primera etapa de la Volcat. El resultado lo véis arriba, las sensaciones, contradictorias. Y es que tras rodar muy muy cerca del selecto grupo cabecero hasta media carrera, me he venido abajo, con un amago de pájara que he podido mediosalvar a tiempo y síntomas de calambres. Puede parecer raro que un ciclista de carretera y fondista como yo, salga bien y acabe mal, pero el esfuerzo y el estrés que me supone seguir el ritmo biker me agota muchísimo física, técnica y mentalmente, y como me pasó hace dos semanas he cruzado meta arrastrándome. Mañana segunda etapa… ¿¿tendré que optar por salir más despacio??
Última hora Volcat, etapa 1.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
4 comentarios:
Joder, lo que andan algunos máster...
Animo Ibon. A mi me passa lo mismo pero en la carretera. A recuperar y mañana a tope de nuevo.
mañana más y mejor, ánimo!
El de master 40 de ha dejao O_O
Publicar un comentario