CHALLENGE DE MONTAÑA



21.08.16
BARCELONA. Después de cincuenta días, he vuelto a la competición de carretera acompañado de mis primos gemelos Vincent y Thomas Cabanel con dos pruebas con final en alto muy bonitas y pero muy diferentes. El sábado por la tarde se disputó la Ripoll-Vallter 2000 en el que afrontamos la subida más larga y exigente del calendario catalán. Por los entrenamientos de las dos últimas semanas, sabía que estaba bien, pero como el año pasado, sólo pude ser segundo a 39 segundos de un vencedor que subió como una moto. El domingo por la mañana, sin apenas tiempo de recuperación, nos hemos acercado a la Costa Brava para disputar la clásica Escalada al Castell de Blanes. Con un recorrido de 2 kilómetros y final en una pared, el ganador sale de la suma de los tiempos de dos sectores; una carrera en línea primero y una crono individual después. Consciente de que no es una prueba idónea para mí y sin haber hecho una preparación específica para una prueba tan corta, como de costumbre, lo pasé muy mal de salida pero, en progresión, pude ser otra vez segundo a 13 segundos del vencedor. Así, con la pena de acumular dos segundos puestos más, pero con la satisfacción de haber ganado la Challenge y de ver como un año más sigo manteniendo el nivel, he cumplido en un fin de semana agotador pero a la vez muy gratificante. Lo mejor, que he podido disfrutar viendo la progresión de mis primos de 19 años que han hecho dos carrerones (segundo y sexto en la general de la Challenge). El año que viene me meriendan…


Al control de firmas en Ripoll…


Dándolo todo entre la niebla.


Con el mejor apoyo nada más acabar Vallter 2000.


Podium en Blanes con Guillem Muñoz y Alex Sucias.

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Podéis ver todos los detalles de las dos carreras siguiéndome en mi cuenta de Strava.

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