COMER, ESTAR, ESTAR, COMER


02.07.12
BARCELONA. Cuando un ciclista desea que llueva como pretexto para no salir a rodar, ya sea por cansancio físico o por falta de motivación, entra dentro de la lógica. Pero cuando después de una jornada de agua amanece un espléndido día como el de hoy y opta por quedarse en casa sin hacer absolutamente nada resulta mucho más extraño… No me reconozco.


No hay comentarios: